Ministerio de Medio Ambiente llama al fuego por no controlar granjas porcinas de Yucatán

Un colectivo de siete organizaciones ha escrito al Presidente López Obrador y a la Ministra de Medio Ambiente, María Luisa Albores, para denunciar el impacto ambiental de las grandes granjas porcinas en el estado de Yucatán y para castigar a las autoridades por no controlar la industria.
En una carta abierta publicada por la organización no gubernamental Indignación, el colectivo — "representantes de varios pueblos mayas de la Península de Yucatán" — dijo que la industria de la cría de cerdos a gran escala ha crecido más rápidamente en el estado de Yucatán en los últimos años que en cualquier otro lugar del país.
"El establecimiento de granjas con miles de cabezas de cerdos es una actividad comercial que tiene múltiples impactos ambientales", dijo la carta, citando graves daños a " nuestra tierra, agua, recursos naturales y forma de vida.”
Anteriormente se han planteado preocupaciones sobre el impacto de las granjas de cerdos en la población de abejas de Yucatán y en sus cenotes, o sumideros naturales.
Las siete organizaciones, entre las que se encuentran el Consejo Maya de Yucatán Occidental, el Comité Maya de Homún y el Comité de Residentes de Yaxkukul, también dijeron que el establecimiento de enormes granjas de cerdos ha violado "nuestra autonomía y autodeterminación.”

Han presentado varios informes de daños ambientales, sociales, culturales y territoriales causados por granjas porcinas a gran escala, dijeron, y han pedido a los tres niveles de gobierno que tomen medidas para "frenar esta actividad y garantizar nuestro derecho a la autodeterminación y un medio ambiente saludable."Pero" hasta la fecha, ninguna autoridad nos ha escuchado", decía la carta.
En ese contexto, el colectivo dijo que " tomó nota con sorpresa "de que la Secretaría de Medio Ambiente federal (Semarnat) admitió en un comunicado del 25 de marzo que" uno de los principales problemas ambientales en la Península de Yucatán es el aumento de granjas porcinas.”
En una declaración con el título, " ¿Dónde estaban los seudoambientalistas cuando la verdadera devastación del sureste de México comenzó hace años? la Semarnat dijo que estaba trabajando para remediar el " desastre socioambiental "que las administraciones pasadas" permitieron y promovieron "en beneficio de unos pocos por encima del bien común.”
La declaración, una respuesta a quienes han denunciado el proyecto del Tren Maya, citó "algunas situaciones graves de los últimos 30 años que realmente han dañado la riqueza natural" del sureste de México, la región por la que pasará el ferrocarril de 1,500 kilómetros.
Uno de los ejemplos citados fue el "crecimiento indiscriminado" de granjas porcinas.
"En el estado de Yucatán, la asociación de porcicultores locales ha mencionado tener al menos 500 fincas en 50 municipios, whose cuyo impacto en la salud humana y el medio ambiente debido a la deforestación, el desequilibrio ecológico y la contaminación de cenotes es innegable", dijo Semarnat.
Dado que el gobierno federal reconoció los graves problemas creados por las granjas porcinas, el colectivo Yucatán dijo estar sorprendido de que no haya tomado medidas para remediar la situación.
"Hasta ahora, las acciones implementadas to por el ejecutivo federal (y estatal) para detener esta actividad que afecta seriamente a nuestros pueblos son inexistentes", dijo la carta.
El colectivo se quejó de que ni el Presidente López Obrador ni otros funcionarios que han viajado a Yucatán con él han abordado el tema o se han reunido con las comunidades afectadas "para escucharnos y atender nuestras peticiones.”
También dijo que no ha tenido respuesta de la ministra Albores a pesar de invitarla a reunirse con personas afectadas negativamente por la industria porcina.
"Frente a esta situación, una vez más y de manera abierta, nos gustaría invitarlos a reunirse con la gente standing para hacer frente a esta industria que contamina nuestro territorio y agua y pone en riesgo nuestra supervivencia e identidad cultural", dijo la carta.
"In En el contexto de un país multicultural como el nuestro, el diálogo intercultural entre los pueblos indígenas y las autoridades del momento es esencial", dijo el colectivo,
"extend Extendemos una invitación para visitarnos entre el 6 y el 13 de abril en el pueblo de Homún, donde llevamos seis años
"Nosotros y otras personas que vivimos con los impactos de esta industria queremos iniciar dialogue un diálogo sobre las acciones que se deben llevar a cabo para proteger nuestro agua, medio ambiente y salud y nuestros derechos como pueblo maya.”
Los residentes de Yucatán han protestado anteriormente contra la "mega granja" Homún en Mérida, la capital de Yucatán. El año pasado, la Corte Suprema confirmó la suspensión de las operaciones de la granja, que se detuvieron por primera vez después de una decisión judicial de Yucatán en 2018; sin embargo, los activistas temen que se les permita reanudar.
Greenpeace dijo a finales de marzo que había recogido a través de una petición en línea más de 181,000 firmas contra el impacto adverso que las grandes granjas porcinas tienen en el medio ambiente de Yucatán. La petición instó a las autoridades a no permitir la construcción de más granjas o la expansión de las existentes.