6 cabezas en el techo de un automóvil: un sombrío recordatorio de quién está a cargo en Chilapa

Las autoridades están investigando otro homicidio múltiple después de que seis cabezas humanas fueran dejadas en el techo de un automóvil en Chilapa, Guerrero, el jueves.
La policía estatal respondió a los informes de la espeluznante escena el jueves por la mañana temprano. Otros restos humanos fueron encontrados en bolsas dentro del automóvil, que estaba estacionado en la vía principal de Chilapa, una pequeña ciudad a unos 60 kilómetros al este de la capital del estado, Chilpancingo.
Se colgó un cartel entre dos árboles en la acera al lado de donde estaba estacionado el automóvil.
"En Chilapa está estrictamente prohibido vender y consumir cristal, secuestrar, cobrar extorsiones y robar", dijo.
"Esto les pasará a todos los que andan por ahí haciendo tonterías. Todos estos crímenes merecen la pena capital y las reglas se aplican porque se aplican. Esta plaza tiene un dueño y es respetada.”

No está claro quién perpetró el crimen y quiénes son las víctimas, pero un grupo criminal llamado Los Ardillos y otro llamado Los Rojos operan en Chilapa y han estado involucrados en una guerra territorial durante años.
La antigua policía y la policía comunitaria también están involucradas en una guerra abierta, informó El País. La policía comunitaria dijo a ese periódico que Los Ardillos son los principales instigadores de la violencia y responsables de al menos 38 asesinatos y 18 secuestros desde 2015.
La Procuraduría General de Justicia de Guerrero dijo que había abierto una investigación sobre el asesinato de las seis víctimas desconocidas.
Los Ardillos y Los Rojos continúan operando en Chilapa a pesar de que la Guardia Nacional y el ejército han tenido una presencia permanente en el municipio desde enero de 2020. Su despliegue, que ha encontrado cierta resistencia por parte de los residentes, siguió al asesinato de 10 músicos indígenas en Chilapa ese mes. Los Ardillos presuntamente cometieron ese delito.
Niños de hasta seis años de edad han recibido entrenamiento de combate de la policía comunitaria de Chilapa para que puedan defenderse en caso de un ataque de un grupo criminal.
El último incidente de violencia en el problemático municipio siguió a las recientes masacres en los estados vecinos de Michoacán y Puebla.
Veinte personas murieron en una pelea clandestina de gallos en Zinapécuaro, Michoacán, el domingo pasado, hasta 17 fueron ejecutadas en la calle en el pueblo de San José de Gracia en el mismo estado el 27 de febrero y nueve personas fueron asesinadas dentro de una casa en Atlixco, Puebla, el 9 de marzo.
Con informes de El País y Reforma