Ovidio Guzmán, son of Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, extradited to the US

Ovidio Guzmán López, son of convicted drug trafficker Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, has been extradited to the United States eight months after he was captured in Culiacán, Sinaloa.
El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, anunció la extradición del líder de 33 años de la facción “Los Chapitos” del Cártel de Sinaloa en un comunicado emitido por el Departamento de Justicia estadounidense el viernes.
“Hoy, como resultado de la cooperación policial entre Estados Unidos y México, Ovidio Guzmán López, líder del Cartel de Sinaloa, fue extraditado a Estados Unidos. Esta acción es el paso más reciente en el esfuerzo del Departamento de Justicia para atacar todos los aspectos de las operaciones del cartel”, dijo Garland.
El fiscal general agregó que “la lucha contra los cárteles ha implicado una valentía increíble por parte de las fuerzas del orden de Estados Unidos y de los miembros del servicio militar y policial mexicano, muchos de los cuales han dado sus vidas en la búsqueda de la justicia”.
La captura de Guzmán López el 5 de enero desató una ola de violencia en Culiacán que dejó 30 muertos, entre ellos 10 militares. Según los informes, el presunto traficante se encuentra ahora detenido en el Centro Correccional Metropolitano en el centro de Chicago.
Guzmán López, apodado “El Ratón”, enfrenta cargos de tráfico de drogas, lavado de dinero y otros cargos en Estados Unidos, donde su padre está encarcelado en las instalaciones “Supermax” cerca de Florence, Colorado.
Los fiscales alegan que participó en lo que Garland ha llamado “la operación de tráfico de fentanilo más grande, violenta y prolífica del mundo”.
Guzmán López, quien fue arrestado brevemente en 2019 antes de que las autoridades decidieran polémicamente liberarlo para evitar que un brote de violencia se intensificara aún más, luchó contra su extradición a los Estados Unidos, incluso haciendo la extraña afirmación de que en realidad no es hijo de “ El Chapo”.
En una carta incoherente enviada al medio Milenio en mayo, Los Chapitos –el nombre colectivo de cuatro de los hijos de Guzmán Loera– negó su participación en el negocio ilícito de fentanilo.
Pero Guzmán López finalmente no pudo evitar seguir los pasos de su padre al ser extraditado al país donde el Cartel de Sinaloa ha enviado innumerables cargamentos de narcóticos durante décadas.
Mike Vigil, exjefe de operaciones internacionales de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), dijo que extraditar a una persona con un perfil tan alto como el de Guzmán López suele tardar al menos dos años porque los abogados suelen presentar numerosas impugnaciones como táctica dilatoria. , situación que el presidente López Obrador ha reconocido en el caso de “El Ratón”.
Dado que fueron necesarios poco más de ocho meses para que “Chapito”, de 33 años, fuera enviado al norte, Vigil cree que el gobierno de López Obrador facilitó la extradición.
"Esto sucedió más rápido de lo normal", dijo Vigil, citado en un informe de Associated Press.
Sugirió que los llamados de algunos legisladores del Partido Republicano para que Estados Unidos utilice el ejército contra los cárteles en México –algo que describió como “teatro político”– aumentaron la presión sobre el gobierno mexicano para que actuara en el caso de Guzmán López.
López Obrador dijo este lunes que Guzmán López fue notificado que su extradición había sido aprobada y decidió no impugnar legalmente la decisión. También dijo que es importante que México no dé municiones a “quienes utilizan el tema del narcotráfico con fines políticos en Estados Unidos”.
“Hay dos temas que se utilizan mucho cuando hay elecciones en Estados Unidos: el narcotráfico y la migración”, dijo López Obrador, quien encabeza un gobierno que se ha esforzado en demostrar que está comprometido con la lucha contra el fentanilo y otras drogas ilícitas.
La asesora de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Liz Sherwood-Randall, quien se ha reunido con funcionarios en México en múltiples ocasiones este año, dijo en un comunicado que la extradición “es un testimonio de la importancia de la cooperación actual entre los gobiernos estadounidense y mexicano en la lucha contra los narcóticos y otros desafíos vitales”.
“…Agradecemos a nuestros homólogos mexicanos por su colaboración para trabajar para salvaguardar a nuestros pueblos de los criminales violentos”, añadió.
The extradition comes five months after U.S. prosecutors unsealed drug trafficking and other charges against more than 20 Sinaloa Cartel members and associates, including Ovidio Guzmán López, Jesús Alfredo Guzmán Salazar, Iván Archivaldo Guzmán Sálazar and Joaquín Guzmán López.
Llevar a Ovidio a Estados Unidos ha sido una prioridad del gobierno de Estados Unidos, donde el fentanilo introducido de contrabando desde México es uno de los principales impulsores de una crisis de sobredosis de narcóticos. Las sobredosis mortales de fentanilo aumentaron un 94% entre 2019 y 2021, y se estima que ahora 196 estadounidenses mueren cada día después de ingerir el poderoso opioide sintético, según datos oficiales citados por The Washington Post.
Guzmán López ha sido acusado formalmente en Nueva York, Chicago y Washington DC de tráfico de drogas, entre ellas fentanilo, cocaína y heroína. Se espera que primero sea juzgado en Illinois.
Vigil dijo que la captura y extradición de Guzmán López a Estados Unidos es “una victoria simbólica”, pero agregó que “no va a tener impacto alguno sobre el cartel de Sinaloa”.
El cartel “seguirá funcionando” y “continuará enviando drogas a Estados Unidos”, dijo.
Uno de los hermanos de Ovidio, Iván Archivaldo Guzmán Salazar, se encuentra entre los 10 fugitivos más buscados por la DEA. Otro hermano, Jesús Alfredo Guzmán Salazar, fue retirado recientemente de la lista de los más buscados, pero sigue prófugo.
Estados Unidos ofrece recompensas de 10 millones de dólares por información que conduzca a sus arrestos, y de 5 millones de dólares por Joaquín Guzmán López.
La administradora de la DEA, Anne Milgram, dijo en abril que el Cartel de Sinaloa y el Cartel de Jalisco Nueva Generación representan “la mayor amenaza criminal que Estados Unidos haya enfrentado jamás” dado que son “principales responsables de impulsar la epidemia de intoxicación por drogas” en ese país.
Con informes de AP, Reuters, EFE y The Washington Post