CDMX supera a Tapachula en número de solicitudes de asilo en mayo

Por primera vez registrada, la Comisión Mexicana de Atención al Refugiado (Comar) está recibiendo más solicitudes de asilo en la Ciudad de México que en la sureña ciudad de Tapachula, en la frontera con Guatemala.
El director de Comar, Andrés Ramírez, dijo al diario Milenio que el aumento de solicitudes de asilo en la capital se había notado en los primeros 18 días de mayo, tendencia que podría continuar.
“El panorama está cambiando porque todos estos años ha sido en Chiapas, entre Tapachula y Palenque, donde por mucho la mayoría de las personas han pedido refugio”, dijo, y agregó que el estado sureño históricamente ha acaparado el 70% de todas las solicitudes.
Sin embargo, en los últimos años, Tapachula ha visto una afluencia de inmigrantes tan creciente que ha dejado a las oficinas locales luchando para hacer frente.
Se estima que unos 40.000 inmigrantes están atrapados en la ciudad, en su mayoría esperando visas humanitarias que les permitan cruzar el país legalmente. Cansados de esperar citas, varios grupos de migrantes han formado caravanas masivas para caminar hacia el norte hasta la Ciudad de México o la frontera con Estados Unidos.
“Al ritmo que vamos vamos a llegar fácilmente a 140.000 solicitantes de asilo en Comar”, dijo Ramírez a Milenio. “Sería una marca histórica”.
Dijo que un factor clave de este aumento había sido la migración masiva de haitianos, muchos de ellos huyendo de la crisis política en espiral y la guerra de pandillas en su país de origen. Otros son haitianos que habían vivido en Chile o Brasil antes de llegar a México. Incluyendo a este último grupo, los haitianos representaron el 65,1% de las solicitudes de asilo en los primeros 18 días de mayo, tuiteó Ramírez.
Una vez en la Ciudad de México, muchos haitianos aún se encuentran en un limbo burocrático, durmiendo en tiendas de campaña mientras sus solicitudes se trasladan entre Comar y el Instituto Nacional de Migración (INM). La mayoría no busca el estatus de refugiado, que no permite el tránsito fuera del estado de emisión, sino la tarjeta de visitante humanitario que les permitiría continuar su viaje a los EE. UU.
Algunos alegan que la confusión entre estos dos documentos se utiliza para paralizar ambos procesos.
“México no quiere inmigrantes; México solo quiere que nos vayamos a Estados Unidos”, dijo un migrante al diario El País en abril. “Pero no nos quieren dar el papel para continuar, y no podemos quedarnos aquí”.
Un informe reciente del Banco Mundial citó a México como uno de varios países que está experimentando disminuciones netas en la población y necesitará talento migrante a medida que cambie la demografía de su población.
Con informes de Milenio